Cae una red que vendía en internet por encargo vídeos con abusos sexuales a niños

España - Madrid.- (lne.es) «Material inédito y de calidad». Éste es uno de los reclamos que aparecían en las más de doscientas páginas web cerradas en una operación internacional contra la distribución de pornografía infantil en la red, que se ha saldado con la detención de 49 personas en España. Además, se ha imputado a otras 15 personas por comprar material pedófilo, calificado por la Policía Nacional de «extrema dureza».

La organización, gestionada por mafias de Bielorrusia y con infraestructuras en Estados Unidos, España y Reino Unido, ofrecía por 75 euros al mes el acceso a dos centenares de sitios web cuyo contenido se basaba en pornografía infantil protagonizada por menores, en su mayoría con edades por debajo de los 13 años. El contenido, al que se accedía tras el pago de la cuota y con una clave, incluía imágenes y vídeos de niños y niñas mientras eran violados o posaban desnudos en compañía de otros menores. Los «abonados» también podían pedir fotos y vídeos por encargo. Las autoridades calculan que los criminales han podido facturar hasta dos millones de euros.

«Como pagaban una cantidad mensual no querían fotos o vídeos que estuvieran muy vistos o con niños que ya circularan por la red. Exigían material nuevo, con niños abusados recientemente. Por esa razón pensamos que había encargos de material», aseguró Enrique Rodríguez, inspector jefe de la brigada de investigación tecnológica de la Policía Nacional.

La investigación comenzó a raíz de la denuncia de varios internautas sobre el contenido de estas páginas. Los agentes rastrearon las más de 50.000 ips (las direcciones virtuales que identifican los ordenadores) desde donde se realizaron los accesos y descargas de las imágenes. También rastrearon las tarjetas de crédito con las que se pagó el acceso. Buena parte de las 49 detenciones y de las 15 acusaciones por comprar material pedófilo se concentra en Cataluña. Uno de los detenidos, en este caso en Valencia, reconoció ser productor y distribuidor de pornografía infantil, ya que realizaba grabaciones domésticas en las que él mismo aparecía abusando de un menor. En España, la Policía Nacional realizó 62 registros domiciliarios.